Experiencia del joven Luiz Sérgio de Carvalho que llegó al plano espiritual después de 23 años de vivir en la Tierra. Víctima de un accidente automovilístico, viene a traer noticias de él a su familia, especialmente a su madre, hablando del mundo que encontró.
Describe sus impresiones de forma sencilla, espontánea y sin pretensiones, manteniendo en una atmósfera de serenidad, a veces conmovedora, una franca jovialidad que alegra al lector. Es una lectura amena, que lleva gratamente a la revelación de lo que ya no es un misterio, sino, a lo sumo, para algunos, una duda, es decir: induce al lector a aceptar la continuación de la vida en algún lugar del vasto Universo.