Eres toda mi noche
A mí me gustabas en el desierto
con el suelo lleno de estrellas,
en su centro un tronco finado
y nada más que eso
Así eres toda mi noche
lo que nunca sé y siempre quiero
una noche sepultada sin alguien
que la busque, sin alguien
En la noche nadie habla
eso dicen, pero a veces me acerco
y entre las capas densas de arena
se mezclan unos hilos de ruido
Eres toda mi noche, y las estrellas
se pintan con la sangre que dentro de mí
va pasando, se dibujan con lápiz:
delirante, fino y siempre
Entonces sonrío, sonrío lo que siempre es
y siempre quiero: una noche apagada
de abajo hacia arriba, la calma de la orilla
que en el mar se borra
La noche sepultada tan dentro
que sólo se prende una duda:
¿y yo?