Todos estábamos vivos

ebook

By Enrique Llamas

cover image of Todos estábamos vivos

Sign up to save your library

With an OverDrive account, you can save your favorite libraries for at-a-glance information about availability. Find out more about OverDrive accounts.

   Not today

Find this title in Libby, the library reading app by OverDrive.

Download Libby on the App Store Download Libby on Google Play

Search for a digital library with this title

Title found at these libraries:

Library Name Distance
Loading...
La nueva novela del autor de "Los Caín" «Uno de los mejores libros de este otoño, que consagra a Enrique Llamas entre nuestros grandes autores de ficción. A una narración que engancha de principio a fin se le unen las virtudes de una estructura sólida y un giro de guion absolutamente maestro que nos hacen reconocerlo como uno de los autores de mayor proyección de nuestro país». Maica Rivera, Literocio «Ningún lector de "Los Caín", uno de los debuts más prometedores de la narrativa española de las últimas décadas, habrá dejado de esperar con ansiedad la segunda novela de Enrique Llamas. Estamos de enhorabuena». Almudena Grandes Madrid, 9 febrero de 1980. Los más modernos de la capital se acicalan para asistir a un concierto en la Escuela de Caminos de la Universidad Politécnica, que con el tiempo se convertirá en un hito al ser considerado como el comienzo de la Movida Madrileña. Nadie quiere perdérselo: allí estará la joven Adela, hija de una actriz retirada y un marqués; Diana, que tiene oscuros tratos con siniestros personajes que la buscan por toda la ciudad; Teo, el novio de ésta, que aspira a consagrarse como el cantante de moda y Ric, novio de Aldo, el chico para todo que arregla tuberías atascadas. Al concierto también acudirá Siberia; esa diosa punk que brilla con luz propia y parece atraer a todos y todas. La mañana del día siguiente ya nada será igual: uno de ellos aparecerá muerto en un portal del barrio de Malasaña y todos, de alguna manera, habrán perdido parte de su inocencia.
Todos estábamos vivos