Gracias a estos sencillos gestos con las manos, que pueden realizarse en cualquier lugar, sentados, tumbados, de pie o caminando, es posible recargar rápidamente nuestras reservas de energía, mejorar nuestra calidad de vida, prevenir y curar muchas enfermedades, pero sobre todo restablecer el equilibrio interior aprendiendo a gestionar correctamente nuestras emociones. Los Mudras te ayudarán a: controlar la ira o la rabia, invocar tu poder, sabiduría y valor, combatir el estrés y la ansiedad, alimentar la confianza en ti mismo, superar el miedo, la envidia, la negatividad, sentirte protegido, luchar contra las preocupaciones. Y también hay Mudras para la tristeza y la alegría, la estabilidad y la fragilidad, el afecto y la paz interior. Los mudras actúan simultáneamente sobre cuerpo, mente y alma, ejerciendo un impacto preciso sobre nosotros con el único objetivo de mejorar nuestro bienestar y restablecer el equilibrio interno.