Guiada por sus visiones proféticas, Keila se enfrenta al opresivo Consejo Terran. ¿Pero se puede confiar en la fuente de sus visiones? 
La Sedición Divina tiene lugar en el año 2872 y sigue a la joven rebelde marciana Keila Eisenstein en su lucha contra el opresivo Consejo Terrano. 
En una visión, Keila se da cuenta de que para alcanzar su objetivo de liberar a su pueblo, primero tiene que liberar la colonia de asteroides Edén del tirano Abraham Goldstein. Lo consigue y toma el control de Edén. 
Una vez conseguido el control de Edén, Keila finge su propia muerte para engañar al oficial del Consejo Terrano asignado para detenerla, el contralmirante Bjorn Muller. 
Keila decide utilizar Edén como su base de operaciones y engañar a los miembros del Consejo Terrano para que se enfrenten entre sí. Keila se enfrenta a una serie de dificultades para derrotar al poderoso Consejo Terrano, que ha dominado el sistema solar y oprimido a la mayoría de la humanidad durante más de 500 años. 
Sin embargo, Keila cuenta con una baza contra estas abrumadoras probabilidades: Su misteriosa conexión divina. 
Sus visiones la guían, y con el acceso a la tecnología del difunto Abraham Goldstein, Keila puede desvelar secretos que la ayudarán a liberar a la humanidad de la opresión de los pocos plutócratas de élite que dominan a toda la humanidad. 
Pero su conexión tiene un precio. Por lo tanto, ¿son los zetanos, que controlan a Keila como una marioneta, realmente mejores que los opresores del Consejo Terrano a los que pretende sustituir?