A la mayoría de los niños pequeños les encanta explorar su entorno y es realmente el deber de los padres asegurarse de que existen medidas de seguridad para mantener al niño a salvo de cualquier percance que pueda ocurrir debido a este ejercicio de exploración. Dado que los niños suelen ser bastante ajenos a los peligros que pueden derivarse de estos ejercicios de exploración, los padres deben extremar la vigilancia y tomar todas las precauciones necesarias para que la seguridad del niño sea una prioridad.
A menudo es necesario hacer cambios en los espacios de la casa y en los alrededores cuando hay una nueva incorporación a la familia en forma de niño. Estos cambios se hacen necesarios sobre todo desde el punto de vista de la seguridad, ya que la presencia de un niño en la ecuación requiere algunas consideraciones serias en este ámbito concreto.

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