La FILOSOFÍA EN LA ALEMANIA DE MEDIADOS DEL SIGLO XIX estaba dividida en dos grandes corrientes: 1- los IDEALISTAS, seguidores de HEGEL y 2- los MATERIALISTAS, con FEUERBACH a la cabeza.
Marx y Engels harán una crítica profunda a ambas tendencias, entendiendo que –más allá de sus diferencias– ambas se manejaban negando la realidad material e histórica en que el hombre se desenvuelve.
Aunque Marx tomará de Hegel la dialéctica, atacará su idealismo. Y aunque compartirá con Feuerbach la crítica al idealismo, criticará el materialismo de este filósofo por ser una visión que ve a la materia como algo eterno e inmutable.
EN DEFINITIVA, MARX CRITICA AL IDEALISMO DE HEGEL Y AL MATERIALISMO DE FEUERBACH POR SER AMBOS CONSERVADORES FRENTE AL ORDEN SOCIAL. EL MATERIALISMO HISTÓRICO DEFENDIDO POR MARX, EN CAMBIO, PLANTEARÁ LA FUNCIÓN PRÁCTICA Y REVOLUCIONARIA DE LA FILOSOFÍA, QUE SÓLO SERÁ ÚTIL SI SIRVE PARA TRANSFORMAR LA SOCIEDAD