Las Bocas del Ródano, allí donde uno de los grandes ríos de Europa se divide antes de verter las aguas del deshielo suizo-alpino en el Mediterráneo, es el departamentomás poblado de Provenza. Su corazón es Marsella, antigua colonia griega y la segunda ciudad más grande de Francia, rebosante de vida cultural. Con los erizados mástiles y fuertes del Vieux Port (puerto viejo) en el centro, posee un intenso aroma magrebí –importado de los vecinos Túnez, Argelia y Marruecos– y el orgullo propio de una veterana ciudad marinera, que contrasta con la inagotable energía de sus panoramas artístico, cultural y gastronómico. Tras sus márgenes de hormigón se extienden altozanos costeros llenos de pinos y con preciosas calanques (calas), y en el interior se halla la bella y aún próspera ciudad termal romana de Aix-en-Provence, reposando en el Pays d'Aix, tan adorado por Cézanne.