El cadáver de una mujer de 33 años aparece en una cuneta cerca de una discoteca. Aunque es la Policía Nacional de Valencia la que se tiene que encargar del caso, el padre quiere que sea Yolanda Alapont, policía municipal de Quart de Poblet. El comisario de Valencia Centro acepta. Empieza entonces una tanda de interrogatorios, con sus tíos, amigas y amigos, el novio secreto de la víctima, el padre oculto de su hijo, vecinos, propietarios de locales de debajo de la finca, bailarinas de la discoteca, camareras... Incluso hacen un viaje a Madrid porque encuentran en la hemeroteca una noticia de un cuerpo colocado en la misma posición. Mientras, también hay varios episodios amorosos y sexuales entre la protagonista y otro de los agentes.