Acompañadas de alegres y divertidas ilustraciones, Stephanie Blake nos trae las aventuras de Simón, un pequeño conejo blanco que transmite toda la vitalidad de la infancia: es adorable, tiene mucha energía, le encanta hacer travesuras ¡y es muy muy divertido! Simón tiene que empezar el colegio, pero la idea no le resulta nada atractiva. Esa noche no pega ojo, y a la mañana siguiente apenas puede probar bocado. Sin embargo, para sorpresa de Simón, en el colegio suceden mil cosas, ¡todas ellas muy divertidas! ¡Ahora ya no quiere volver a casa!