Que sea la última vez que me llamas Reina de la Tele

ebook Diario de una presentadora de televisión · MR Narrativa

By Máximo Huerta

cover image of Que sea la última vez que me llamas Reina de la Tele

Sign up to save your library

With an OverDrive account, you can save your favorite libraries for at-a-glance information about availability. Find out more about OverDrive accounts.

   Not today

Find this title in Libby, the library reading app by OverDrive.

Download Libby on the App Store Download Libby on Google Play

Search for a digital library with this title

Title found at these libraries:

Library Name Distance
Loading...
Una novela divertidísima escrita por una estrella de la televisión sobre cómo es la vida de una estrella de la televisión. Margarita Gayo, reina indiscutible e indiscutida de la televisión, recibe una carta de la revista TP que hará tambalearse su vida: quieren darle el premio a toda una carrera... Lo que debería ser motivo de alegría se convierte en una auténtica pesadilla. ¡La están llamando VIEJA! ¡¡¡Le están anticipando la jubilación!!! Desde ese mismo día Margarita vivirá sin vivir en sí. Tiene que hacer algo. Por ejemplo, acercarse a la clínica de su amiga Rita para que le dé unos pinchacitos que la hagan parecer más joven, irse de compras a las tiendas haute couture para darse un baño de masas y quitarse la depresión, programar un viajecito a París para adquirir el último modelo de Christian Lacroix... Y todo ello mientras los problemas se suceden a su alrededor: Luchi Lobo, que fue salir de Miss España, ponerse unos pechos enormes en la clínica Mallorca y tener programa para ella solita, le quiere quitar su puesto; en su pueblo, en vez de ofrecerle una plaza conmemorativa, sólo le dan una simple calle... y encima, en París, conoce a un modelazo guapísimo, divertido e inteligente de sólo ¡23 años! que la seduce y la conquista. Y así transcurre su vida hasta que llegue el día de la gran gala, ensayando el discurso una y mil veces: "El PREMIO que hoy tengo entre manos quiero que sea el alimento profesional de todas las demás aspirantes a presentadoras, todas esas misses, putones verbeneros, lobas, carroñeras, perras, busconas, zorrongas, descentradas, arribistas, liantas, alimañas peliteñidas, siliconadas, bichos, perversas, sabandijas, bestias, musarañas, rastreras escotadas, minifalderas golfas y frescas que empiezan en la televisión"...
Que sea la última vez que me llamas Reina de la Tele