Cuando se experimenta la muerte, inmediatamente se vive la vida con mayor intensidad que nunca, explicaba Sueiro. Y le creo porque lo vi hacerlo. A partir de su experiencia, Víctor atesoró cada segundo dándole el verdadero valor que tiene: el de irrepetible. Eso lo hizo sentirse libre y lo colmó de paz. En esta segunda mirada de lo que ocurre al morir, el autor profundiza aún más en el tema con nuevos testimonios y con un orgulloso mano a mano con Ernesto Sabato, ni más ni menos. De aquella charla, que no supo ser reportaje por la confianza con la que se entregaron el uno al otro, surge lo insólito dentro de lo natural, hablando –obviamente– sobre el tema de lo sobrenatural. Es mucho más sencillo de lo que aparenta, y en esa simplicidad que sólo tienen los grandes nace el misterio. En este libro el periodista busca arrancarle el traje de drama a la muerte y la pone en escena desnuda como a una recién nacida para que descubramos la abrumadora belleza que nos espera a todos inexorablemente. ¿Qué ocurre después de la muerte? Él lo sabe y no es el único, como podrán leer en estas páginas. Vivan esta aventura apasionante, esta búsqueda sin descanso y esta inquietud permanente por dar con la verdad. Rocío Sueiro