La Dra. Iris Kellerman pensó que regresar a Salem, Oregón, sería sencillo: cuidar de su anciano padre y luego irse. Pero cuando unos obreros de la construcción desentierran la mochila de un niño cerca de la antigua escuela primaria, se ve envuelta en el misterio que ha atormentado su ciudad natal durante décadas: tres niños que desaparecieron sin dejar rastro en 1995.
Como psicóloga forense especializada en trauma infantil, Iris no puede resistirse a consultar sobre el caso sin resolver. Cuanto más indaga, más afloran sus propios recuerdos enterrados: fragmentos de aquella terrible noche que ha pasado toda su vida adulta olvidando. Cada pista apunta a alguien en quien confía, alguien que la ha estado observando desde su regreso.
Los niños desaparecidos formaban parte de un grupo de terapia dirigido por su padre. Su madre adoptiva, Delphine, tuvo acceso a las tres víctimas. Y la propia Iris no recuerda nada de su vida antes de los ocho años, la misma edad que los niños desaparecidos.
Cuando empiezan a llegar mensajes anónimos con detalles sobre sus secretos más oscuros, Iris se da cuenta de que el asesino sabe que se está acercando a la verdad. Pero algunas revelaciones tienen un precio. Algunos lazos familiares se construyen con mentiras. Y algunas madres harán lo que sea para proteger a sus hijos, incluso si eso significa destruirlos.
El pasado se niega a permanecer enterrado en Salem.
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