En una época donde las decisiones personales parecen estar regidas por algoritmos, "tendencias" y miradas ajenas, ¿qué ocurre cuando alguien se detiene y decide ser, simplemente, ella misma? Esta es la historia de Samy, una adolescente que no se rebela con gritos ni pancartas, sino con dos simples trazos negros en el rostro. No son disfraces. No son provocaciones gratuitas. Son cruces, marcas voluntarias y visibles, que desafían la estética, las normas sociales y el mandato silencioso de "encajar".

No se trata solo una narración, sino también una exploración. A través de la historia de Samy, nos adentramos en el conflicto que viven muchos jóvenes cuando su autenticidad choca con un mundo que prefiere las máscaras. El relato se estructura en siete actos que siguen el recorrido emocional y simbólico de Samy, desde su primer gesto de disidencia hasta las consecuencias que éste despierta en su entorno.

Además del relato, el libro incluye una encuesta a especialistas en psicología adolescente, educación y sociología, quienes ofrecen distintas perspectivas sobre el fenómeno de la rebeldía juvenil. También se presenta una serie de tipologías de jóvenes rebeldes, basada en casos reales y patrones conductuales observados en distintos contextos, para ayudar a comprender las múltiples formas que toma esta necesidad de ruptura. Finalmente, se incluyen algunas reflexiones finales dirigidas a padres, educadores y a los propios jóvenes, con el objetivo de abrir un espacio de diálogo y comprensión.

Este no es un manual. No pretende dar respuestas cerradas. Es, como las cruces de Samy, una invitación a mirar de nuevo, a escuchar con más atención y a aceptar que, a veces, la incomodidad es el primer paso hacia una verdad más humana.