Ambrosio Bocanegra fue en su tiempo el almirante más valorado de Castilla, un corsario genovés que daría muchas victorias a Castilla. Tovar fue su sucesor y narra sus gestas en el Guadalquivir, Lisboa y, sobre todo, en La Rochelle, donde hundió la flota inglesa y consiguió un botín del 20 % del PIB de Britania, aparte de rescates por el de Penbroke y sus caballeros.He aprovechado el escrito para incluir un cuento: El rey que abandonó su reino, una propuesta de película: Una mosca en la aureola, y otro cuento con mucha poesía: El globo.