En una manada donde la lealtad a tu pareja es ley, enamorarse del lobo equivocado puede ser mortal.
Nunca quise enamorarme del Alfa.
La manada Blackwood tenía dos reglas:
Regla 1: El amor está prohibido a menos que sea con tu pareja predestinada.
Regla 2: Romper las reglas significa perderlo todo.
Durante seis meses, mantuve en secreto mis momentos robados con Zane Blackwood. Nuestro acuerdo era simple: sin ataduras, sin promesas, solo consuelo mientras esperábamos a nuestras parejas predestinadas.
Excepto que no era simple.
Mi estúpido corazón rompió la regla de oro. Me enamoré de él. Con fuerza.
Cuando finalmente reuní el coraje para confesar mi amor, él destrozó mi mundo con una sola revelación: encontró a su pareja.
Mi hermana gemela, Imara.
Ella fue quien me enseñó el significado del odio. La única persona que había despreciado desde que tengo memoria. Ahora tenía al único hombre al que había amado de verdad.
Mi dolor no era nada comparado con la ira de mi hermana cuando descubrió nuestro secreto. Exigió justicia. Castigo.
Así que fui exiliada. Expulsada de la manada por el único hombre que pensé que podría protegerme.
Sola y desconsolada, encontré refugio en un pueblo humano, intentando reconstruir una vida desde las ruinas. Justo cuando pensaba que podía empezar de nuevo, una revelación impactante lo cambió todo.
Estaba embarazada de los gemelos del Alfa.
Ahora debo proteger a mis hijos no nacidos mientras me escondo en un mundo lejos de casa. Tengo que encontrar la fuerza para construir una nueva vida mientras mi corazón aún anhela un amor que nunca estuvo destinado a ser.
Pero los secretos siempre salen a la luz. Y un día, lo vuelvo a ver en mi puerta.
¿Cómo construir un futuro cuando el pasado se niega a dejarte ir?