En un contexto global y altamente competitivo, las universidades están llamadas a generar y transferir conocimiento a los sectores económicos, con el fin de estimular el crecimiento y desarrollo de los países. Especialmente, en países emergentes como los de América Latina existe la necesidad de hallar el camino adecuado para que el potencial tecnológico que tienen las universidades pueda ser transferido de manera efectiva al entorno y se puedan generar cambios que beneficien a las economías de la región. Este libro muestra las etapas y estrategias clave de un proceso de transferencia tecnológica universitaria mediante patentes e identifica buenas prácticas que ayudan a descubrir el mejor camino para este proceso de acuerdo con las características propias de la universidad y del contexto. A través de la revisión de literatura y del análisis de cuatro casos de estudio de universidades destacadas en América Latina, así como del caso de la Universidad de Massachusetts en Estados Unidos como referente, el libro proporciona un punto de partida valioso para las universidades de economías emergentes que buscan iniciar o fortalecer procesos de transferencia de resultados de investigación derivados del patentamiento de sus tecnologías.