El clan HAPU evalúa los méritos de los soldados en batalla. Deben cubrir las plazas de los caídos. Antes de ser asignado a una misión, Nehuén, el electo, cumplirá con el ritual de rigor: un tatuaje y una escarificación. Viajan al cinturón de volcanes, en Hawaii, en un momento en que se ha producido un curioso aumento de la actividad volcánica. Las erupciones no serían necesariamente fenómenos naturales, sino tecnológicos. Detrás de ellas estaría el Bloque Chino: habría un patrón en el Cinturón de Fuego. Así, se nutrirán de los datos extraídos en el análisis de los restos de lava. Con ello, buscarán ratificar una teoría y descubrir sus derivaciones prácticas, como el saboteo de robots detectores ante los riesgos de tsunamis volcánicos. Si no pueden demostrar la premeditación, quedará como una catástrofe más causada por el cambio climático, y los infiltrados conseguirán el control del Bloque Farmacéutico.