El libro reúne tres obras concebidas específicamente para ser representadas con títeres. Estos textos se crearon bajo la premisa de aprovechar al máximo las posibilidades visuales y dinámicas que ofrece el teatro de títeres, superando las limitaciones propias del teatro convencional con actores. Además, el proceso de escritura se llevó a cabo sin preocuparse inicialmente por las dificultades técnicas de su puesta en escena, partiendo de la idea de que la materialización de estas obras en el escenario constituye una fase creativa independiente. Son obras que invitan a la reflexión sobre temas universales como la muerte, el duelo y el crecimiento personal, utilizando el poder de la naturaleza y el simbolismo fantástico para crear una narrativa emocionalmente resonante. En textos profundamente visuales y simbólicos, a través del uso de títeres y elementos naturales, se crean imágenes sobre el ciclo de la vida, el cambio y la fragilidad de los seres humanos frente al tiempo y la enfermedad. Además, incluye una sátira mordaz sobre el autoritarismo y la guerra, que utiliza el teatro de títeres para transmitir un mensaje profundo sobre el poder, la resistencia y la importancia de la memoria colectiva. Su combinación de humor, crítica social y elementos visuales lo convierte en una obra rica en simbolismo y reflexión.