S i n o p s i s
Publicado originalmente en 1866, El Jugador es una de las obras maestras indiscutibles de Fiódor Dostoievski, el célebre autor ruso cuyo genio literario transformó la narrativa psicológica del siglo XIX. Este clásico inmortal no solo refleja la aguda introspección del autor sobre la naturaleza humana, sino que también expone, con una honestidad desgarradora, su propia batalla con la ludopatía, una adicción que marcó profundamente su vida y su obra.
En esta novela, Dostoievski nos sumerge en el microcosmos de Ruletenburg, una ciudad ficticia centrada en la ruleta, donde convergen personajes que, con sus mezquindades, ambiciones y desvaríos, dibujan un retrato descarnado de la sociedad ruso-europea de su época. La trama sigue a Alexei Ivanovitch, un tutor atrapado en una red de amores imposibles, obsesiones peligrosas y tensiones familiares, mientras se desarrolla la hipocresía que rodea a la abuela, una anciana extravagante y autoritaria que se entrega con fervor casi infantil al juego.
A través de un estilo que combina un agudo realismo con el análisis psicológico más profundo, Dostoievski desentraña las complejidades de la avaricia, el amor no correspondido y las ansias de poder. La novela expone, con punzante ironía, la falsedad de quienes orbitan alrededor de la anciana jugadora, esperando ansiosos el momento en que su fortuna caiga en sus manos.
El Jugador -aparte de ser una narración sobre la adicción al juego- es una meditación sobre la libertad, la autodestrucción y los laberintos del espíritu humano. Lectura fascinante que combina momentos de intensa acción con los retratos psicológicos de personajes que, hasta hoy, resultan profundamente vigentes.
Considerado un clásico de clásicos, El Jugador demuestra por qué Dostoievski es uno de los nombres más reverenciados de la literatura universal. Para quienes buscan explorar la naturaleza humana en su estado más crudo y contradictorio, El Jugador es una joya literaria imprescindible.
-El -Quijote -Literario