En Colombia, hablar del derecho a la salud, conlleva abordar su doble connotación, por una parte, un derecho fundamental autónomo e irrenunciable reconocido desde la Carta Política, por otra, un servicio público esencial obligatorio; la primera de estas visiones emerge desde el particular, como un portador de derechos, la segunda, se desarrolla desde el Estado, ya que, como servicio público, su responsabilidad se encuentra a su cargo. En un esfuerzo conjunto de sus autores, un insumo para el aun amplio trabajo que sobre la salud en Colombia hace falta recorrer, la presente obra es una herramienta y una invitación a continuar en el desarrollo de un asunto neurálgico que le compete a la sociedad en su conjunto.