Deborah es una mujer feliz, tiene un marido cariñoso, Steve, dos gemelos a los que adora y una hermosa casa con jardín. Hasta ahora su vida es perfecta y ha tenido todo lo que una mujer puede desear. Pero últimamente Steve no está de buen humor, se ha vuelto tímido y parece que algo lo perturba en el fondo. Deborah no puede convencer a su marido de que comparta sus preocupaciones y Steve no parece tener intención de confiarle a su esposa lo que lo está carcomiendo profundamente. Unos días antes de Navidad Steve sale de casa sin dejar ninguna nota. Literalmente desaparece y no queda rastro de él. Deborah, preocupada, se pone en contacto con los amigos y conocidos de su marido, pero ninguno de ellos tiene idea de dónde podría haber ido Steve. Deborah no tiene más remedio que ponerse en contacto con la policía. Es en ese momento cuando la mujer se da cuenta de que sabe muy poco sobre el padre de sus hijas. Cada día, las investigaciones resaltan aspectos de Steve que ella desconoce y que le resultan inquietantes. ¿Quién es realmente Steve? ¿Un profesional estimado? ¿Un asesino en serie maníaco? ¿Y por qué aparece un grupo de trabajo del FBI en su puerta? En un crescendo de giros y vueltas, Deborah comienza a profundizar en el pasado de su marido, hasta que se le revela una verdad impactante que la hace cuestionar todas las decisiones que ha tomado en la vida. ¿Cuánto sabemos sobre quienes nos rodean? ¿Alguna vez conocemos realmente a la persona que amamos, o nos engañamos pensando que es un ángel que cayó del cielo para llenar nuestros vacíos y darle sentido a nuestra vida diaria?

Una intensa y conmovedora novela de suspenso psicológico que arrastra al lector a un torbellino de emociones y giros hasta un final inesperado y que no deja otra salida que el perdón que cada uno de nosotros puede conceder por cada mala elección tomada en la vida. Una novela de misterio absolutamente imprescindible que encantará a los lectores de Angela Marsons, Nicole Trope, Lisa Regan y Robert Dugoni.