Claudio, uno de los emperadores más improbables de Roma, pasó gran parte de su vida en la sombra, considerado débil e incapaz por su propia familia. Sin embargo, contra todo pronóstico, se convirtió en el líder de un imperio vasto y turbulento. Este libro nos lleva desde su juventud, marcada por el desprecio de los Julio-Claudios, hasta su inesperado ascenso al poder tras el asesinato de Calígula. En su reinado, Claudio demostró ser un líder astuto y eficaz, introduciendo reformas significativas, expandiendo el imperio con la conquista de Britania y fortaleciendo la administración imperial.

A través de un enfoque accesible y cautivador, este libro explora las intrigas que rodearon su ascenso, su compleja relación con el Senado y su vida personal, marcada por matrimonios escandalosos y traiciones. Claudio, lejos de ser una figura menor en la historia de Roma, se revela como un emperador decidido y capaz que, a pesar de los desafíos, dejó una marca imborrable en el imperio.