Este libro ofrece una mirada personal y práctica sobre los distintos enfoques en la enseñanza del francés, explorando las ventajas y desventajas de usar un método fijo basado en un libro frente a una clase completamente personalizada. Desde mi experiencia como docente, he trabajado con métodos estructurados, como Édito, Alter Ego y Adosphère, y también he desarrollado mis propias actividades para adaptar las clases a las necesidades específicas de los estudiantes.
A lo largo del libro, presento las fortalezas de ambos enfoques: el uso de un libro aporta coherencia y progresión al aprendizaje, mientras que diseñar actividades desde cero permite una flexibilidad que responde a los intereses y metas de cada alumno. También exploro un enfoque mixto, en el cual el libro actúa como una guía estructural, complementado con actividades propias para añadir profundidad y dinamismo.
El objetivo de este libro es ayudar a otros docentes a encontrar el equilibrio entre estructura y personalización, y a inspirarlos a adaptar sus clases según el perfil de sus estudiantes. Con recomendaciones de métodos para cada nivel, herramientas y recursos digitales, este libro se convierte en una guía completa para quienes buscan enriquecer sus prácticas de enseñanza del francés, ya sea utilizando un libro, creando sus propias actividades o combinando ambas opciones de manera efectiva.