Miro hacia atrás: las letras que se fueron en mensajes, los intentos de llamadas frustrados, la oscuridad de esa cueva. Miro y era eso, una cueva. Seguramente el amor pasó por tu vida en muchas de sus formas, pero ¿alguna vez te preguntaste si es posible amar sin perdón o sin palabras? ¿Cuántas veces se puede volver a amar? ¿Es el amor capaz de construir el mundo de lo posible? ¿Qué me dirías si te dijera que, al final, hasta que no te miran no te ves? A lo largo de toda la obra, la autora busca jugar con la apasionante oscilación entre el dolor del desamor y la chispa de la ilusión que hace brillar las almas de los enamorados, los amantes y los amados. Con un estilo estético y realista al principio, pero más libre y desestructurado hacia el final, la autora recorre y reúne entre versos veinte años de historias de amor.