Hay que advertir al lector que puede enamorarse de muchos de los personajes que habitan esta historia ambientada en la primera mitad del siglo pasado; también debe saber que la historia en la que se adentra solo le decepcionará por su inevitable final.

Por último, es importante decirle al lector que, aunque el hecho de que la historia tenga un final forma parte de lo inacabado de todo lo vivo, dicho final seguirá siendo impactante. Para bien o para mal, eso queda por descubrir.

Las páginas de esta novela cuentan con todos los ingredientes del romance: amor, adversidades de las épocas, viajes exóticos, emblemas culturales fundamentales, apego a los lugares y lo más destacado de la cocina griega. ¡Una delicia!

La novela de Drăghici podría recibir premios no solo literarios, sino también gastronómicos. Aunque no existen estrellas Michelin para la literatura, habría que considerar tal iniciativa.

— Alexandru Matei