Imelda García Suarez, no sólo es maestra de profesión y acción, sino de corazón, lo que hace está pensado, sentido y ejercitado para el bien de sus estudiantes que resultan ser todas las personas que caminan a su lado. Este es el primero de una serie de cuentos con los que se busca que todos conozcamos, respetemos, valoremos, amemos y cuidemos el medio ambiente. La historia nos invita a dejar de valorar sólo los ambientes artificiales, para lograr descubrir que en la flora y la fauna está la verdadera y esencial riqueza de nuestro planeta.